Japón y su nueva ley de ciberseguridad: ¿modelo a seguir o riesgo para la privacidad?

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¿Qué establece la nueva ley japonesa? El 16 de mayo de 2025, Japón aprobó una ambiciosa ley de ciberseguridad que introduce el concepto de “ciberdefensa activa”. Esta legislación busca anticiparse a los ciberataques mediante medidas preventivas que incluyen: Vigilancia de comunicaciones: El gobierno podrá monitorear ciertos aspectos de las comunicaciones electrónicas, especialmente entre Japón y países […]

¿Qué establece la nueva ley japonesa?

El 16 de mayo de 2025, Japón aprobó una ambiciosa ley de ciberseguridad que introduce el concepto de “ciberdefensa activa”. Esta legislación busca anticiparse a los ciberataques mediante medidas preventivas que incluyen:

  • Vigilancia de comunicaciones:
    El gobierno podrá monitorear ciertos aspectos de las comunicaciones electrónicas, especialmente entre Japón y países extranjeros, si hay sospechas de ciberataques. Aunque se afirma que se respetará la privacidad del contenido, se podrán registrar metadatos como direcciones IP y tiempos de transmisión
  • Neutralización de servidores enemigos:
    La policía y las Fuerzas de Autodefensa podrán intervenir y desactivar servidores utilizados para lanzar ciberataques, incluso fuera del país, si se considera una amenaza crítica.
  • Obligaciones para infraestructuras críticas:
    Empresas de sectores como energía, transporte, finanzas y telecomunicaciones deberán reportar obligatoriamente cualquier ciberataque. El incumplimiento puede conllevar sanciones.
  • Colaboración público-privada:
    Se fomenta el intercambio de información sensible entre el gobierno y empresas privadas para mejorar la respuesta ante amenazas.
  • Implementación gradual:
    El sistema completo entrará en vigor en 2027, con una fase de preparación y pruebas hasta entonces

¿Cómo se compara con la legislación española?

España, en 2025, sigue un enfoque más garantista en cuanto a derechos fundamentales, aunque también ha reforzado su marco normativo:

  • Directiva NIS2: España está adaptando esta directiva europea, que amplía los sectores obligados a implementar medidas de ciberseguridad y reportar incidentes
  • Esquema Nacional de Seguridad (ENS): Establece requisitos técnicos y organizativos para entidades públicas y privadas que prestan servicios al Estado.
  • Protección de datos y privacidad: La legislación española, en línea con el RGPD, prohíbe la vigilancia masiva sin orden judicial. El derecho a la privacidad y al olvido está fuertemente protegido

¿Qué pasaría si España adoptara una ley como la de Japón?

Ventajas potenciales:

  • Mayor capacidad de respuesta ante ciberataques complejos.
  • Mejora en la coordinación entre sectores público y privado.
  • Disuasión frente a actores estatales o grupos criminales organizados.

Riesgos y consecuencias:

  • Pérdida de privacidad: La vigilancia preventiva sin orden judicial podría vulnerar derechos fundamentales.
  • Desconfianza ciudadana: La percepción de un “Estado vigilante” podría erosionar la confianza en las instituciones.
  • Choque con el marco legal europeo: La legislación de la UE prioriza la protección de datos y la supervisión judicial, por lo que una ley como la japonesa podría ser incompatible con el derecho comunitario.

Conclusión

La ley japonesa representa un cambio de paradigma hacia una ciberseguridad ofensiva y preventiva, mientras que España mantiene un enfoque más reactivo y garantista. Si bien el modelo japonés puede ofrecer mayor protección frente a amenazas sofisticadas, su implementación en España requeriría un profundo debate legal, ético y social.

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